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Somos un grupo de personas que entrenamos en el Gimnasio del Cerebro, en los momentos del principio de la pandemia, decidimos concentrarnos en cosas que realmente nos construyan, ya que no podíamos hacer nada con lo que acontecía en el planeta. Entonces, comenzamos este proyecto de entrenamiento de comunidad, donde, durante meses, buscamos lugares, desarrollamos ideas, buscamos y recibimos información cualificada para el desarrollo de una comunidad autosustentable. Luego de meses, encontramos el lugar, a dos horas de la ciudad, con una población muy reducida y donde no había comercios cercanos, pero, con grandes condiciones naturales y óptimas para el desarrollo de nuestro proyecto.

Allí continuó nuestro entrenamiento, construyendo viviendas, desarrollando huertas, proveyéndonos de luz, agua e internet, para poder hacer nuestro espacio practico ahí. Mientras hacíamos este entrenamiento, realizábamos también, nuestro autoaprendizaje interior y actividades espirituales para generar mejores conexiones entre nosotros y con el lugar que nos albergaba.

Tiempo después de este arduo trabajo, pudimos completar la fase básica de nuestra aldea, que cuenta con todos los servicios, 7 casas, con la capacidad de albergue y hospedaje para 15 personas, proyectando mayor capacidad en un futuro.

Para la financiación y creación de nuestra aldea, nos unimos y comercializamos para recaudar fondos mediante el desarrollo de un mercado comunitario de frutas y verduras durante la pandemia, así como otros eventos sociales y educativos.

Hoy queremos abrir y compartir nuestra experiencia y nuestra aldea con el mundo, invitándolos a participar de actividades holísticas, deportivas y conexión con la naturaleza, teniendo todas las condiciones para esta experiencia y la mayor predisposición de Amor para compartir y servir a quien nos visite, como así también seguir aprendiendo y nutriéndonos de nuevas experiencias y conocimientos.